A diferencia de la calidad del aire y la humedad, la temperatura, afecta principalmente a nuestro confort. En consecuencia, notamos esta propiedad del aire casi inmediatamente. En cuanto hace frío en el exterior, el gasto energético se dispara, y cuando aparecen los primeros rayos de sol, buscamos rápidamente el fresco. Por tanto, se puede distinguir entre temperaturas frías y cálidas. Dado que todo el mundo está involucrado en esto todos los días, esta característica es la que requiere menos explicaciones. Sin embargo, nos gustaría explicar los distintos métodos para enfriar o calentar la temperatura.