¿Cómo mejorar la mala calidad del aire interior? Consejos para una primavera más fresca

El sol brilla, las ventanas están abiertas y usted disfruta plenamente de la primavera. Pero ¿sabía que esta época del año en particular ejerce mucha presión sobre la calidad del aire interior? Ventilar es bueno, pero al hacerlo también deja entrar en casa polen, polvo fino y otros contaminantes invisibles. Por no hablar de que las alergias, como la fiebre del heno, están en su punto álgido en estos momentos. No se preocupe: con unos cuantos ajustes inteligentes, puede mejorar la calidad del aire de su casa y respirar aliviado.

Ser crítico con la ventilación

El aire fresco es importante, pero elige el momento adecuado. Por la mañana o cuando no hace viento, la concentración de polen suele ser menor. Ventila breve y enérgicamente, sobre todo si vives junto a una carretera muy transitada o eres propenso a las alergias. Deja una ventana entreabierta por la noche si vives en un barrio tranquilo, pero sólo si el aire del exterior es más limpio que el del interior.

Combatir el polvo y el moho en su origen

¿Uno de los principales responsables de la mala calidad del aire interior? La acumulación de polvo y la humedad. Pasar la aspiradora con regularidad (preferiblemente con un filtro HEPA), limpiar en húmedo y airear los colchones ya ayuda enormemente. Preste atención también a los lugares con demasiada humedad, como el baño o el sótano, donde puede crecer moho de forma inadvertida. ¿Siente olor a humedad o condensación en las ventanas? Entonces suele ser señal de que la calidad del aire no es óptima. Para problemas como estos, un deshumidificador como Bora resulta muy útil. Así combatirá el moho, la condensación y el aire viciado desde la raíz.

Medir = saber

No se ve. A menudo no se huele. Pero está ahí: mala calidad del aire interior. Piense en partículas, polen, COV (compuestos orgánicos volátiles) y esporas de moho. ¿Quiere saber realmente cómo es el aire de su salón o dormitorio? Utiliza un higrómetro o medidor de la calidad del aire, como Sense. Este aparato compacto te muestra de un vistazo cómo están la temperatura y la humedad en tu casa. Práctico y elegante.

Utilice un purificador de aire para el dormitorio o el salón

Un purificador de aire es quizá la forma más eficaz de mejorar la calidad del aire interior. Especialmente durante la primavera, cuando se padece fiebre del heno, se es muy sensible al polen y a las partículas de polvo. Un modelo inteligente como el purificador de aire Smart Bright 2 filtra hasta el 99,97% de toda la contaminación del aire gracias a un sistema de filtración de tres capas(HEPA H13 + filtro de carbón activado). Se ajusta automáticamente mediante un sensor de PM2,5 y además funciona de forma silenciosa. También es perfecto como purificador de aire para el dormitorio.

Y gracias a la Duux, sabrás exactamente cómo es la calidad del aire y controlarás Bright 2 fácilmente con tu smartphone o asistente de voz.

Preste atención a las influencias estacionales

La primavera trae muchas cosas buenas, pero también mucho polen. Mayo es un mes notorio para el polen de gramíneas, que puede agravar considerablemente las alergias. ¿Tiene animales domésticos? También transportan polen adicional al interior. Es preferible mantener zapatos, abrigos y mascotas fuera del dormitorio y lavar los textiles con regularidad. Recuerde: lo que vuela fuera, al final acaba dentro. A menos que tome medidas.

En resumen: el aire fresco exige decisiones inteligentes

La mala calidad del aire interior suele ser un problema invisible, pero con importantes consecuencias. Desde la fatiga hasta las alergias y la congestión, el aire que respira influye mucho en su bienestar. Afortunadamente, puede mejorar mucho con unos sencillos pasos: ventile a conciencia, mantenga limpia su casa, mida la humedad y utilice un purificador de aire como Bright 2 para una protección extra.

¿Quiere saber más sobre cómo mejorar su clima interior? Consulte nuestra página de consejos sobre calidad del aire y descubra qué soluciones se adaptan a su situación.